Más allá del consuelo que puede brindar el toque de un ser amado, las caricias poseen un impacto sobre el cerebro que puede llegar a alterar la forma de querer, la salud y procesos en este órgano.
Al recibir una caricia, tu cuerpo activa el sistema neurofisiológico que se encarga de procesar el tacto afectivo; como resultado se crea una ilusión (se percibe la piel del otro más suave). Este fenómeno permite a la mente estrechar lazos emocionales”, revela un estudio publicado en Current Biology
¡Que sea un hábito!
De acuerdo al mismo estudio este efecto puede denominarse como “suavidad social”, que tiene como finalidad actuar como pegamento emocional.
El efecto de la ilusión puede cambiar dependiendo de la zona donde se da la caricia y la intensidad de esta; los receptores de la piel responden diferente e inducen diferentes grados de placer”, indica la investigación.
¡No es todo!
Los beneficios de las caricias son diversos, y no solo afectan el cerebro sino a la salud en general.
1. Incrementa la felicidad. El contacto con la piel de otra persona estimula la producción de hormona oxitocina, encargada de la felicidad y bienestar.
2. Brindan seguridad. Las señales táctiles dan seguridad y confianza. Al tocar se activa el nervio vago del cuerpo que está relacionado con la respuesta compasiva.
3. Aumenta las tasas de supervivencia. Investigadores de la Universidad de California en Berkeley destaca que el contacto visual y una palmada en la espalda alargan la vida de pacientes con enfermedades graves.
Ahora que tienes más motivos para acariciar, ¿qué esperas para disfrutar de sus beneficios todas las noches?
By: Salud180
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